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Malasia da un paso atrás en su adhesión al Estatuto de Roma

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Coalición por la CPI
Malasia no adherirá al Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional por cuestiones políticas del proceso nacional.

La decisión de Malasia de denunciar al Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional (CPI) ha sido una decisión decepcionante, luego de solo un mes de firmar el instrumento de  adhesión. La Coalición por la Corte Penal Internacional – una red global de más de 2.500 de organizaciones de la sociedad civil presente en 150 países – exige al Estado de Malasia que reconside su retirada.

El 5 de abril de 2019, el Primer Ministro, Tun Dr Mahathir Mohamad, anunció que Malasia se retiraría del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional (CPI) luego de solo un mes de firmar su instrumento de adhesión. Aunque la adhesión aún debe entrar en vigor, esta retirada ya ha generado varias preguntas, tanto dentro como fuera de Malasia, sobre los motivos detrás de esta decisión.  

"Abandonamos el tratado no porque pensemos que el Estatuto de Roma es malo para nosotros, sino por la confusión política que se ha creado," anunció el Primer Ministro, Tun Dr Mahathir Mohamad.

La CPI es la única institución permanente del mundo capaz de investigar y procesar a individuos por genocidio, crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y el crimen de agresión. La decisión de no formar parte de la CPI es un retroceso para Malasia en su lucha por la justicia global. De acuerdo con el artículo 126 (2) del Estatuto de Roma, la adhesión de Malasia aún debe entrar en vigor el 1° de junio de 2019. 

Bill Pace, Coordinador de la Coalición por la CPI, pidió al gobierno de Malasia que continúe avanzando: “Pedimos a Malasia reconsiderar su posición y seguiremos estando a disposición de las autoridades del país para contribuir con el esclarecimiento de las confusiones sobre el mandato de la CPI. El principio de complementariedad, el pilar fundamental del Estatuto de Roma, establece que los sistemas judiciales nacionales son quienes tienen la jurisdicción primaria en la investigación y el procesamiento de los presuntos perpetradores de los crímenes bajo el derecho internacional, una clara señal de respeto a la soberanía estatal”, declaró Pace durante una misión de una semana de duración en Kuala Lumpur. El Sr. Pace también pidió a Malasia que guíe al resto de la región con su ejemplo y señaló que en los tiempos que corren “ninguna región tendrá un mayor impacto en el destino de los principales desafíos del orden legal internacional que la región de Asia-Pacífico.”

La Asociación de abogados de Malasia también expresó una profunda preocupación dado que la decisión del gobierno afecta la credibilidad internacional de Malasia y sigue apoyando la ratificación del Estatuto de Roma de Malasia. “La Asociación de abogados de Malasia seguirá promoviendo la adhesión de Malasia al Estatuto de Roma y a los seis instrumentos internacionales de derechos humanos centrales y sus protocolos opcionales”, notó el Presidente Abdul Fareed Abdul Gafoor.

La adhesión de Malasia

Este giro de 180° del gobierno de Malasia en su ratificación, deshace los años de trabajo de la sociedad civil y los activistas para promover la rendición de cuentas por las faltas de derechos humanos en la región. Las organizaciones locales e internacionales han trabajado duro para alentar al Sur de Asia, incluido Malasia, a adherir al Estatuto de Roma, esto incluye la Campaña de Justicia Global de la Coalición (CJG). En 2011, todo ese trabajo dio sus frutos cuando el gobierno de Malasia anunció su decisión de adherir, con el apoyo del Ejecutivo y el Parlamento. Sin embargo, debido a cuestiones técnicas, el proceso se retrasó por varios años.

El 4 de marzo, el Ministro de Asuntos Exteriores, Datuk Saifuddin Abdullah depositó el instrumento de adhesión al Estatuto de Roma de la CPI y declaró que Malasia quería unirse la CPI para “combatir los crímenes internacionales”, pero la adhesión estaría "sujeta a las condiciones de Malasia." El documento firmado fue depositado en la Secretaría General de las Naciones Unidas ese mismo día.

La adhesión de Malasia fue celebrada por la sociedad civil, ya que sirvió de ejemplo para alentar a otros gobiernos de Asia-Pacífico a comprometerse con el fin de la impunidad por los peores crímenes del derecho internacional. Este anuncio se dió antes del retiro de Filipinas del Estatuto de Roma, que entró en vigor luego de la decisión del año pasado del Presidente Duterte para abandonar la Corte en vistas de un examen preliminar.

Uno de los objetivos de la adhesión de Malasia al Estatuto de Roma era llevar justicia a los refugiados rohingya a través de la CPI. En febrero de 2019, el Ministro de Asuntos Exteriores de Malasia, Saifuddin Abdullah habló sobre la importancia de "castigar a los responsables de atrocidades en contra de los rohingyas en la Corte". También agregó que no le negarán a los rohingyas la posibilidad de buscar refugio en su país. Más de 88.880 rohingyas viven hoy en Malasia, de acuerdo con las Naciones Unidas.

Razones para abandonar la CPI

Luego  del anuncio de la adhesión de Malasia al Estatuto de Roma, el líder de la oposición, Ismail Sabri Yaakob, pidió que se abandonara el Estatuto de Roma, y declaró que “ninguna ley que afecte los intereses de los gobernantes malayos puede hacerse sin el permiso de la Conferencia de Gobernantes”, una cuestión que ha sido respondida por abogados de derechos humanos y constitucionales y por funcionarios en Kuala Lumpur.

El Príncipe de la corona de Johor también se opuso a la ratificación de Malasia, dado que creía que podía “amenazar la soberanía de la nación y, en consecuencia, el estado de los malayos y el Islam”. Luego calificó la ratificación como “inconstitucional.”

Las ideas equivocadas en torno a la cuestión de la soberanía jugaron un papel muy importante en esta decisión, lo que llevó a los funcionarios de gobierno y a los defensores de la CPI en Malasia a reflexionar sobre la falta de educación y comprensión del Estatuto de Roma de la CPI, en todos los niveles. Por otro lado, es necesario aclarar que las inmunidades por los crímenes del Estatuto de Roma para los funcionarios de alto nivel, esto incluye a la Conferencia de Gobernantes, están circunscriptas en las leyes nacionales y que la CPI es una corte de último recurso y solo podrá intervenir si las autoridades nacionales no tienen la intención o no son capaces de hacer justicia por los crímenes internacionales graves.

La decisión de no adherir también generó una manifestación en las puertas del Parlamento el 8 de abril para pedir la renuncia del Ministro de Asuntos Exteriores Saifuddin Abdullah y el Fiscal General Tommy Thomas.

Conclusión

El retiro de Malasia se da cinco meses después de que el país se negara a firmar un tratado de la ONU en contra de la discriminación racial. La Coalición por la CPI exige al gobierno de Malasia que ratifique el Estatuto de Roma y siga trabajando en pos de la justicia global y en contra  de los crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y el genocidio.

Lea el Comunicado de prensa de la Coalición por la Corte Penal Internacional